La novel banda piurana presenta la tercera parte de su ep “SONARES”
El covid-19 ha azotado fuertemente tierras norteñas, centrando su “ki” en Piura, uno de los departamentos que hasta ahora más lamenta las pérdidas. De aquí, conocemos poca música alternativa nueva, son pocos los proyectos que se han atrevido a ir un más allá del pop rock, sin embargo, Transmisión es un caso excepcional.
Sobre Transmisión
Esta banda yace en
Piura, su música es una exploración catártica del corazón desde el punto
metafórico. Cuentan con un EP llamado “Sociedad Porno” lanzado en 2017, en
donde conocemos la estructura sonora donde el bajo protagoniza gran parte de
las canciones, desde el lado lírico encontramos y conocemos el mundo de Vicente,
el vocalista, en donde a través de metáforas nos cuenta diversas historias del
corazón.
A pesar del sonido
amateur que conservaría la banda en esta etapa, fueron evolucionando con el
tiempo, dejando una marcada línea entre la música piurana post Transmisión,
siendo de alguna forma un referente para nuevos artistas, claro, dejando de
lado el sentido de calidad que conservaba la ciudad en este estilo musical.
Su segunda
aparición no sería muy lejana, pues en 2018 estrenaron el videoclip de “Western”,
el cual dio un pequeño giro por ciudades del Perú, llegando a ser una de las bandas
más mencionadas de Piura. Esta canción con aires post punk, hasta indie rock,
sería el inicio a nuevos sonidos para la banda, llegando a consolidar cada vez
más la composición.
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EP “Sonares”
Esta
etapa empezó a finales del 2019 con “Rima”, una canción que, si bien ya
consolida la calidad de la banda, aún no genera esa solidez sonora, la voz de
Vicente se presenta en diferentes tonos, demostrando la capacidad de poder ir
un poco más allá. A partir de aquí, la banda seguiría con los estrenos con
canciones como “Amapola” y “Sonares”.
El
EP se concluye en tres singles que destapan la nueva faceta de la banda, de
aquí en adelante solo basta con experimentar e ir mejorando cada vez más la
consolidación del sonido y lírica. Si bien la banda ya levanta el polvo al
pasar, la valla aún es alta en un país como Perú.
En Sonares es imposible no sentir un nudo en la garganta, pues la voz de Vicente Arturo y los arreglos sonoros que se exponen en los coros se adentran en nuestros oídos. hasta tocar nuestro corazón, la lírica nos abraza fuertemente hasta que el poder del bajo retumba todas nuestras venas. Como la misma banda dice, “Sonares es el plural de la palabra sonar, ya que un sonar representa a cada integrante de la banda”.
